Notas

PROGRAMA DE PROTETIZACION TEMPRANA EN NIÑOS AMPUTADOS DE MMSS
La mano humana posee una enorme riqueza funcional, brinda la posibilidad de ser un órgano prensil, efector y sensorial, permite realizar múltiples movimientos y acciones necesarias para la supervivencia y relación con el medio ambiente. La principal función de la mano es la prensión, además gracias a su compleja inervación sensorial permiten el juicio más fino en lo que respecta a la textura, volumen y temperatura lo cual permite relacionarse y comunicarse con el exterior.

Si bien actualmente el desarrollo tecnológico de las prótesis de miembro superior ha mejorado y sigue en desarrollo, estas siempre serán solo una herramienta de soporte que el paciente debe incorporar y adaptarse lo antes posible para facilitar su inserción y garantizar su autonomía en la vida diaria.

El tratamiento de la protetización infantil ya sea de etiología congénita o adquirida, requiere de la participación de un equipo de trabajo clínico interdisciplinario que aborde la rehabilitación desde un enfoque global y sistemático para lograr en cada fase del tratamiento los objetivos propuestos. Además, la motivación y el soporte familiar son fundamentales para la aceptación de la prótesis por el niño y su entorno.

En Argentina por diversos factores, la protetización en niños comienza en periodos tardíos de su desarrollo lo cual provoca una escasa adaptación y elevado rechazo a la protetización llegada la adolescencia. Es por ello que se ha creado esta unidad integral de médicos Traumatólogos Infantiles, Terapistas Ocupacionales, Kinesiólogos, Bioingenieros, Técnicos en Órtesis y Prótesis, Psicólogos y Educadores que mancomunadamente con el medico Pediatra, el Fisiatra a cargo de la rehabilitación y la ortopedia que confeccionará el equipamiento protésico acompañan y guían el proceso de protetización del niño amputado y su familia.

Se realiza además asesoramiento, entrenamiento y capacitación a profesionales relacionados con dicha problemática que quieran concurrir con sus inquietudes o aportar sus conocimiento, para ese fin nos reunimos los cuartos miércoles de cada mes en la unidad 13 del Hospital de niños Ricardo Gutiérrez y es necesario marcar una consulta previa.

  

PROCESO DE PROTETIZACION

El proceso de protetización se elabora en relación al desarrollo psicomotor del niño y sus etapas de integración de la función de la mano en la corteza cerebral.

Alrededor de los 3 meses se desarrolla el concepto de bimanualidad, por lo que en este periodo debe corregirse la simetría corporal mediante una prótesis estética con apariencia de una mano, que además proporcionará estabilidad en la sedestación, gateo, incrementar mayor amplitud articular, fuerza de Miembros Superiores (MMSS) restaurar centro de gravedad y tenderá a evitar posturas compensatorias y posibles desvíos de columna a causa de estas compensaciones posturales.

La primera prótesis estética es muy importante para favorecer también la adaptación posterior de una prótesis de tipo funcional.

Este tipo de equipamiento debe acompañar el crecimiento del paciente por lo cual los cambios protésicos se realizaran en un tiempo estimativo de 6 a 9 meses aproximadamente dependiendo del crecimiento del niño.

Entre los 24 y 36 meses de edad se recomienda continuar con un tipo de protetización activo, mecánico o mioeléctrico para los niveles de amputación antebrazo y desarticulado de muñeca, mientras que en el nivel de amputación brazo está indicada la prótesis híbrida con un codo pasivo y una mano mioeléctrica.

No debe generalizarse el paso de prótesis pasiva a mecánica o mioeléctrica, sino que debe cumplirse una serie de condiciones como son:

  • Evaluación de equipamiento protésico según peso y tamaño acorde a edad cronológica y esquema corporal del niño protetizado
  • Desarrollo psicomotor acorde a edad cronológica del paciente
  • Adhesión por parte del paciente, de la familia y del equipo tratante
  • Adhesión al tratamiento anterior y necesidad explicita del paciente por incrementar actividades bimanuales y bilaterales
  • Incrementar autonomía en actividades de la vida diaria, tiempo libre y escolares
  • Incrementar actitud de aceptación y autoestima del niño protetizado

Los objetivos que persigue el equipo tratante, se basan en tres pilares de rehabilitación:

  • Abordaje pre protésico

» Muñón indoloro con la máxima funcionalidad articular

» Uso de la extremidad residual con adaptaciones

  • Abordaje Protésico:

» Aceptación de la prótesis como herramienta que posibilita “el hacer

  • Abordaje Post protésico

» Confort y funcionamiento adecuado de la prótesis

» Maximizar la independencia funcional del niño protetizado

– La Rehabilitación precoz, sistemática e interdisciplinaria de estos niños facilita la inserción y garantiza su autonomía en las AVD, actividades lúdicas y escolares.

Ya que permite:

  • Integración de la prótesis al esquema corporal
  • Favorecer el desarrollo psicomotor al facilitar el equilibrio en sedestación, apoyo y gateo
  • Disminuir el rechazo
  • Facilitar la creación del automatismo
  • Mejorar las actitudes posturales anómalas

– El equipamiento será una herramienta y el niño amputado debe tener la posibilidad de utilizarla y adaptarse a ella lo antes posible.


Equipo Multidisciplinario de Equipamiento

Protésico Pediátrico Argentino – EMEPPA

Autores: Traumatólogo Infantil Dr. Ernesto J. Varone, Terapista Ocupacional Jimena Del Piccolo y Bioingeniera Tatiana Rogatky

Contacto: emeppa@gmail.com