Notas

Osteoporosis, una visión integral
Dr. Haraldo Claus Hermberg | Servicio De Endocrinología Hospital Aleman

La osteoporosis es una condición que según la OMS se define como una disminución de la masa y deterioro de la estructura ósea responsable de mayor fragilidad del esqueleto. La consecuencia de ello es la ocurrencia de fracturas óseas por traumatismos mínimos en localizaciones típicas; las vértebras y muñeca en personas relativamente jóvenes y la cadera en personas añosas.

Afecta con mayor frecuencia a las mujeres (pero no en forma exclusiva) después de la menopausia.

En forma muy sintética se pueden dividir sus causas en esqueléticas y extra esqueléticas reconociendo que existe una gran interacción entre ambas. Entre las causas esqueléticas se destacan la densidad (cantidad de material óseo por volumen de hueso), la calidad del material óseo (la materia prima) y su distribución en el espacio (forma y tamaño de los huesos y su arquitectura interna).

Todos estos factores le dan al hueso la propiedad de resistir las cargas de la vida diaria sin sufrir daños en su estructura. Infortunadamente se sobreestimó la importancia de la densidad ósea a partir del momento en que se dispuso de los equipos para medirla (la Densitometría Ósea) al punto que se establecieron criterios densitométricos para el diagnóstico de osteoporosis.

Es así que muchas personas que nunca tuvieron y probablemente nunca tendrán una fractura porque no tienen otros factores de riesgo son caratuladas de osteoporóticas.

La densitometía es un parámetro muy útil para evaluar el riesgo de fracturas osteoporóticas pero no es una condición suficiente para explicar las mismas.

Por el momento no es posible medir los parámetros de calidad ósea sin una biopsia, aunque se está progresando en el desarrollo de equipos para hacerlo en forma no invasiva. Es de esperar que cuando estén al alcance de su uso clínico, su difusión y su uso se hagan con la ponderación adecuada, teniendo en cuenta que la osteoporosis es una enfermedad multifactorial y que ningún aparato por sí solo es la panacea diagnóstica que motiva las conductas médicas.

Entre los factores de riesgo extra esqueléticos cabe mencionar la herencia, el haber padecido fracturas previas, la vida sedentaria, el tabaquismo, antecedentes de haber eliminado cálculos urinarios cálcicos, menopausia temprana, bajo peso, escasa ingesta de calcio y vitamina D y todas las condiciones neurológicas, musculares, osteoarticulares y medicamentosas que conducen a una mayor frecuencia y torpeza en las caídas.

La prevención de las fracturas osteoporóticas se orienta fundamentalmente a modificar favorablemente los factores de riesgo mencionados, es decir, preservar o mejorar la “salud” del hueso y evitar la posibilidad de caídas o reducir el impacto de sus consecuencias. La mayoría de las intervenciones farmacológicas, aunque muy efectivas, apuntan específicamente al primer objetivo, mientras que existen una serie de medidas de muy bajo o ningún costo de un efecto más integral. Sintéticamente podemos mencionar:

  • Cambios en el estilo de vida, especialmente referidos al tabaquismo, ingesta de alcohol y café Aumento de actividad física.
  • Adecuada provisión de fuentes de calcio y vitamina D.
  • Ponderación en la administración de psicofármacos que puedan afectar la coordinación neuromuscular.
  • Asesoramiento en la disposición del mobiliario y otros elementos habitacionales tendientes a facilitar el desplazamiento y evitar las caídas.